Diseñar una formación de impacto exige estrategias para el diseño instruccional de contenidos digitales a la hora de crear, no hay 2 organizaciones iguales y es clave pensar la formación más allá del LMS.
Aquí se presentan 4 estrategias para diseñar contenidos digitales que ayuden a mejorar el impacto en los participantes basado en la motivación, la estractura y el storytelling.
Aprender los fundamentos de la motivación.
El modelo ARCS de motivación comprende atención, relevancia, confianza y satisfacción.
Sin dudas, se puede captar la atención con animaciones, estímulos emocionales y narraciones.
Por ello, comprender la relevancia y generar confianza ayuda a que los estudiantes estén motivados al anticipar las recompensas por sus esfuerzos.
Pensar en la estructura del curso.
Un curso de e-learning bien estructurado aumenta la confianza de los estudiantes, mejorando el impacto de las estrategias para el diseño instruccional.
Por ello, procura crear bloques de contenido de máximo 10 minutos para mantener la atención, más allá de la las diferentes estructuras posibles, desde general a específico o con introducción, cuerpo y conclusión.
Mejorar el impacto visual.
Hoy más que nunca hay que destacar la importancia de que el contenido del curso sea visualmente atractivo.
Por ejemplo, el uso de fotografías, videos, gráficos y animaciones para aumentar el interés visual, siempre con coherencia y relacionadas con el contenido del curso.
El poder de contar historias.
Las emociones impactan en la memoria y motivación, más aún, imágenes con impacto emocional hacen que el contenido sea memorable.
Las historias motivan a los estudiantes y hacen que el contenido sea más interesante, por ejemplo, el uso de anécdotas y ejemplos incorpora historias en el contenido del curso.
Las historias ayudan a los estudiantes a ver la relevancia de la información y entender su conexión personal.